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Hace unos meses, en mi condición de padre de dos alumnos de un colegio público andaluz, decidí en señal de protesta que mis hijos no irían a clase, a ellos les expliqué por qué creía que no debían ir y a su tutor y tutora les escribí una nota en la que explicaba el motivo de su no asistencia. Entre esos motivos, se encontraba la necesidad de poner en valor a maestros y maestras, profesores y profesoras que, de algún modo, habían sido mis héroes en mi infancia, adolescencia y juventud. Aún hoy lo son.

Uno de estos profesores impartía clases en la Universidad de Granada en la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales, de él destacaría la capacidad de mezclar los contenidos lectivos con el planteamiento de juicios críticos suficientemente argumentados. Al menos, así le parecía a un alumno de apenas veinte años. Me refiero al profesor Ángel Javier Gallego Morales, en la actualidad presidente del Consejo Económico Social de Andalucía.

Del profesor Gallego apunté varias citas que empleo habitualmente, en una de ellas, aludiendo a los comportamientos de corrupción, éste indicaba que lo que ocurría arriba era reflejo de lo que ocurría abajo y viceversa. En definitiva, que el comportamiento irresponsable, la falta de ética y la corrupción constituyen fenómenos multinivel.

De vuelta a la necesidad de buscar nuevas fórmulas para explicar la responsabilidad social, al margen de estándares y procedimientos, planteo la necesidad de combinar las palabras denuncia, aquiescencia y corrupción.

Desgraciadamente, al hilo de la idea básica planteada por el profesor Gallego, observamos cómo ante comportamientos irresponsables multinivel (falta de transparencia en las contrataciones, prevaricación, malversación, evasión fiscal, cohecho y un largo etcétera) se impone el silencio y la aquiescencia.

Considero que al fomentar la cultura emprendedora en el sistema educativo es necesario apostar por estrategias, tácticas e instrumentos pedagógicos que ayuden a forjar un pensamiento crítico al alumnado. En definitiva, implica apostar por el desarrollo de la competencia básica “autonomía e iniciativa personal” o, lo que es lo mismo, implica apostar por una sociedad civil con una mayor conciencia crítica.

El planteamiento de la irresponsabilidad asociada a la aquiescencia se ve reflejado en la escena de la película Casablanca en la que el prefecto francés Renault, presionado por el oficial alemán Strasser, ordena el cierre del local de Rick (H. Bogart).  El diálogo es una mezcla entre lo cómico y lo cínico:

Rick: ¿Con qué derecho me cierra usted el local?Aquiescencia y responsabilidad social

Renault: ¡Qué escándalo!, ¡Qué escándalo!, He descubierto que aquí se juega.

Croupier: Sus ganancias, señor. (Ofreciendo un manojo de billetes a Renault)

Renault: Muchas gracias. ¡Todo el mundo fuera!

La escena, apenas veinte segundos, merece ser recordada.

 

Erin Brockovich

Como siempre, la responsabilidad social requiere anteponer a un caso negativo otro positivo, a un diablo en el hombro un ángel en otro hombro (para algo ha de servir aquella vieja diapositiva). En esta línea, podemos encontrar un ejemplo de responsabilidad social relacionado con la no aquiescencia ante un comportamiento irresponsable, en este caso medioambiental, en la película Erin Brockovich, protagonizada por Julia Roberts y dirigida por Steven Soderbergh. En el ámbito de la educación universitaria, de la educación secundaria y  de la formación profesional éste es un buen estudio de caso.

Retomando la cita del profesor Gallego, cabe valorar si tan irresponsable es un comportamiento no ético como lo es la aquiescencia o falta de denuncia de quienes lo observamos. Porque, como diría el prefecto Renault: seguimos descubriendo que, arriba y abajo, aquí se juega.

Nunca he prestado mucha atención a la Iglesia, ninguna a la jerarquía eclesiástica, aunque he de reconocer lo iconográfico de sus proclamaciones, con la fumata blanca como imagen y el “habemus papa” como eslogan.

Sin embargo, la proclamación como papa del cardenal jesuita argentino Jorge Mario Bergoglio me lleva irremisiblemente al polifacético Koestler y a su bisociación creativa, según la cual surgen creaciones al combinar elementos de planos de la realidad distintos. Esta base de creatividad, tan importante para innovar o para tomar decisiones sin más, es la base del humor.

Es Koestler quien cita al escritor francés del siglo XVIII Chamfort en un pasaje de una de sus obras:

Un Marqués de la corte de Luis XVI un día, entrando en el dormitorio de su mujer, la encuentra en los brazos de un obispo. Ante esta escena, el Marqués se va a la ventana y se pone a bendecir a los viandantes que pasaban por la calle.

–   ¿Qué estás haciendo? –preguntó angustiada la mujer.

–   Como monseñor está llevando a cabo mis funciones, yo estoy cumpliendo las suyas –replicó el marqués

Algo de este humor podría encontrarse en la despedida del nuevo papa después de su Primera Cena, como papa, indicando a los cardenales: “Que Dios les perdone por lo que hicieron”.

O puede que no se despidieran, sino que eligieran la canción de Encarnita Polo para proclamar al nuevo papa: el papa Paco.

Pulse para escuchar la canción de proclamación del papa Paco

Pulse para escuchar la canción de proclamación del papa Paco

Hablar de responsabilidad social al fomentar la cultura emprendedora en el sistema educativo, lo mismo que en cualquier ámbito, requiere del uso del estudio de caso y, en concreto, del análisis de la noticia. Aún recuerdo cuando impartiendo mis clases en la Universidad de Almería observaba incrédulo como, para explicar responsabilidad social, se empleaban diapositivas que presentaban a un empresario con un diablo en un hombro y con un ángel en el otro. Imagen tierna donde las haya, pero que edulcora el tratamiento de la realidad, elemento éste último clave a la hora de promover un aprendizaje significativo.

Del mismo modo, en los manuales al uso se hace referencia al Código Ético, al Balance Social y al Manual de Responsabilidad Social. No todo es El Corte Inglés. En mi caso, me gusta acercarme al caso, a la noticia.

Manuel Fernández de Sousa. Presidente de Pescanova. Fotografía de Salvador SAS (EFE)Entre los casos de irresponsabilidad social, el diablo en el hombro, encontramos la noticia que nos habla del falseamiento de datos de la empresa Pescanova, remito a la noticia aparecida en El País (podemos acceder pulsando en la fotografía) . En ella, una empresa de larga trayectoria, como es Pescanova, reconocía haber enmascarado una deuda de 500 a 1000 millones (la tolerancia de los datos es impresionante si observamos el intervalo ofrecido). Sería una noticia interesante para un ciclo de formación profesional o  una clase de universidad, relacionaríamos aquello de la imagen fiel contable (¿?) con la ausencia de responsabilidad social, relacionada en este caso con la veracidad de la información facilitada o, mejor dicho, con su falseamiento.

Dove. Respuesta Social

Dove. Respuesta Social

Entre los casos de respuesta social, comportamiento que supera al de la responsabilidad social, me sigo inclinando por la publicidad de la marca de cosmética Dove (podemos enlazar pulsando sobre la imagen). Este recurso, que empleo en mis clases, en la formación para el profesorado  y que forma parte de los materiales del proyecto educativo «Creando Cantera», es mi forma de ilustrar el ángel que se posaba en el hombro en aquella diapositiva que, por estar en archivo digital, no amarilleaba.

El día 11 de marzo en la localidad sevillana de Osuna, ejemplo de puesta en valor de la arquitectura urbana andaluza, desarrollamos la sesión de preformación dirigida a los equipos directivos de centros del ámbito de actuación del Centro de Profesorado de Osuna-Écija. Intentamos hacer ver que el fomento de la cultura emprendedora es algo más que simular una empresa y expusimos algunas producciones realizadas por nuestro equipo.

De nuevo, en contacto con agentes del territorio andaluz, en este caso con docentes de Jauja, Pruna, Martín de la Jara, El Rubio,…

Todos los miembros del Centro de Profesorado de Osuna-Écija nos hicieron sentir literalmente como en casa, circunstancia que Gracia, Aurelia y quien esto escribe agradecemos sinceramente.

Emocionante y casual fue descubrir a una tataranieta de La Colchona (historia de una unidad de Los Retos de FER I) al repostar en una gasolinera de Estepa.

Es lo que tiene este apego por el territorio y la necesidad de transmitir verdad.

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Me preguntan cómo explicar las actitudes emprendedoras sin recurrir al discurso del malogrado Steve Jobs o al famoso vídeo de los marcianitos que demuestran orientación al logro, orientación al cambio, trabajo en equipo, paciencia, perseverancia… Pienso en las múltiples escenas de películas, recurso éste que empleo como base de diferentes instrumentos y que denomino evocación cinematográfica. Este blog está salpicado de este recurso. Sin embargo, apuesto en este caso por otro recurso.

En algún proyecto he recurrido a la evocación literaria, al uso de la poesía como arma cargada de futuro, que diría el poeta Gabriel Celaya. A Mario Benedetti es uno de los poetas que sobreexploto, en el buen sentido de la palabra, bien para evocar las actitudes emprendedoras o bien para explicar el umbral de rentabilidad. Sí, tambíen se puede.

En la poesía Lento pero viene Mario Benedetti evoca las actitudes y motivaciones que  son propias de las personas emprendedoras.

La paciencia y la perseverancia son una constante “lento pero viene, (…) despacio pero viene”, la referencia a la incertidumbre del entorno la encontramos al hacer referencia al lugar que ocupa el futuro: “hoy está más allá de las nubes que elige”, la búsqueda del elemento: “cuidando sobre todo los sueños prohibidos”, siendo evidente la orientación al logro: “viene con proyectos y bolsas de semillas”, planteando la relevancia de la experiencia y la formación: “los recuerdos yacentes y los recién nacidos”, abandonando el fatalismo y abonándose a la capacidad personal: “cada vez más nosotros y menos el azar”,…

Son múltiples las lecturas, múltiples las posibilidades de evocación. La enseñanza de “Lento pero viene” viene dada por la necesidad de considerar el medio y el largo plazo en los proyectos que emprendemos a lo largo de nuestra vida. La situación actual viene provocada, posiblemente, por esa falta de perspectiva, por un excesivo cortoplacismo en la toma de decisiones a todos los niveles.

Don Mario Benedetti ya no está entre nosotros, nos queda releerlo o escuchar como recitaba este poema. Como escribiría Blas de Otero, y tan bien canta Paco Ibañez, «nos queda la palabra», nos queda su palabra.

Lento pero viene

Lento pero viene y las actitudes emprendedoras

Benedetti, «Lento pero viene» y las actitudes emprendedoras

Lento pero viene
el futuro se acerca
despacio
pero viene
 
hoy está más allá
de las nubes que elige
y más allá del trueno
y de la tierra firme
demorándose viene
 
cual flor desconfiada
que vigila al sol
sin preguntarle nada
iluminando viene
las últimas ventanas
lento pero viene
las últimas ventanas
lento pero viene
 
el futuro se acerca
despacio
pero viene
ya se va acercando
nunca tiene prisa
viene con proyectos
y bolsas de semillas
con ángeles maltrechos
y fieles golondrinas
 
despacio pero viene
sin hacer mucho ruido
cuidando sobre todo
nuestros sueños prohibidos
los recuerdos yacentes
y los recién nacidos
 
lento pero viene
el futuro se acerca
despacio
pero viene
 
ya casi está llegando
con su mejor noticia
con puños con ojeras
con noches y con días
con una estrella pobre
sin nombre todavía
 
lento pero viene
el futuro real
el mismo que inventamos
nosotros y el azar
cada vez más nosotros
y menos el azar
 
lento pero viene
el futuro se acerca
despacio
pero viene
 
lento pero viene
lento pero viene
lento pero viene
Mario Benedetti

Nos preguntaba una maestra, en el intermedio o preámbulo de una conferencia dirigida al profesorado sevillano, que si el tema candente del fomento de la cultura emprendedora no sería una moda.

Planteaba en esa misma jornada que el sistema educativo es per se  un espacio que permite el desarrollo de la cultura emprendedora y que, de algún modo y en base al perfil docente, ya lo viene haciendo. Pasa como a mi madre (D.E.P.), comerciante, ama de casa y mil cosas más y a quien llamaban Carmen la de los muebles. A mi madre nadie le dijo que era una emprendedora. Menos mal, posiblemente hubiera pedido cita a algún especialista.

Podría pasarle como a mi vecina Paca, que volviendo al pueblo tras visitar a un especialista, preguntaba en la botica:

Me ha dicho al médico que estoy obesa. ¿Eso qué es?

A lo que la boticaria, santa paciencia, le responde:

– Que está gorda Paca, que está gorda…

Pues eso mismo le ocurre a gran parte del profesorado, que tratando de forma original el desarrollo de las competencias no ha recibido la etiqueta de emprendedor o emprendedora. Por ejemplo, ¿no hay mucho más fomento de la cultura emprendedora en el desarrollo de una actividad artística abierta que en el desarrollo de unos estatutos de una cooperativa? Actividad esta última de lo más sugerente.

Como dice Luis Ciges a Paco Rabal en el Apocalipsis Español, puede ser que hablemos de cultura emprendedora porque “el Apocalipsis nos ha pillao” o así lo creamos.

El Apocalipsis Español

El objeto, en nuestro caso el fomento de la cultura emprendedora, se convierte en moda cuando pasa de ser una cuestión de fondo a una cuestión de fondos, planteando un concepto forzado frente a lo que sería preferible: un concepto interiorizado.

En este sentido, corre el mismo peligro el noble arte de enseñar a emprender que otras grandes ideas fuerza: el desarrollo local, el desarrollo sostenible, el desarrollo rural,… Corre el peligro de que a fuerza de políticas finalistas se convierta en una cuestión exclusivamente de fondos, no afectando al fondo de la cuestión.

Como diría Paco Rabal, no tengo yo muy claro eso del Apocalipsis.

Los procesos de fomento de la cultura  emprendedora se ven salpicados por expresiones del tipo: emprender para ser tu propio jefe, emprender para poder ganar más dinero o las que plantean al empresario como un usurero más propio del universo literario de Dickens.

En este sentido, hay que dotar de normalidad la imagen de quien emprende, extendiéndola más allá del cliché ejecutivo, contemplando la actividad empresarial ligada a empresas unipersonales, microempresas y PYME’s en general, además de contemplar su carácter multisectorial.

Es necesario evitar campañas de promoción del autoempleo como la llevada a cabo por la Comunidad de Madrid

Campaña Madrid desafortunada

Otras campañas de la misma fuente son más afortunadas (pulsamos en las fotografias para ampliarlas)

Campaña Madrid afortunada

Reproduzco en el siguiente panel estereotipos preocupantes recogidos por ponentes en Jornadas de Cultura Enprendedora de cierto alcance, en el desarrollo de proyectos educativos y en las manifestaciones iniciales de profesorado que participa como alumnado en cursos de los que soy autor. ¿Es esto aprendizaje significativo?

Estereotipos-Barbaridades

En los diferentes proyectos o intervenciones que persiguen el fomento de la cultura emprendedora en el sistema educativo se observa una tendencia, desmesurada según mi criterio, hacia la simulación del funcionamiento de la empresa.

Existe, según mi criterio, una obcecación por llevar la empresa a todos los ciclos educativos para fomentar la cultura emprendedora. No es necesario ni conveniente, en los primeros niveles únicamente hay que hacerla visible salvando el estereotipo, pero es mucho más fructífero para el fomento de la cultura emprendedora desarrollar tácticas educativas que trabajen alrededor de la creatividad, de la lectura proactiva del entorno, del gusto por el conocimiento, de las actitudes propias de las personas emprendedoras (no necesariamente empresarias), de la ética (que llevará a la responsabilidad social) y de las habilidades.

A esta obcecación por mercantilizar la metodología para el fomento de la cultura emprendedora en nuestro equipo la denominamos “el fenómeno Monopoly del fomento de la cultura emprendedora”.

Por eso, el profesorado de educación infantil lo hace de forma tan brillante. Nadie les avisa, nadie les dice que fomentan la cultura emprendedora, pero cuando hay vocación e interés lo hacen tan bien, incluso organizan mercadillos solidarios (crean sus logos, ponen un precio, trabajan la responsabilidad social,…). Espero que comprendan y acepten la ironía. Está claro que no me refiero al profesorado de infantil.

Emprender es mucho más que simular el funcionamiento de una empresa. La rutinaria simulación empresarial permite comprender el funcionamiento de una empresa pero infravalora aspectos como la creatividad, el análisis del entorno o el estímulo de la autonomía e iniciativa empresarial.

En el siguiente diagrama (pulse para ampliar) se reproduce gráficamente el criterio que proponemos para establecer los focos de atención en el desarrollo del fomento de la cultura emprendedora en todos los niveles educativos.

Procesos FCE neveles educativos

El ciclo emprendedor, trabajado íntegramente en ciclos de formación profesional, bachillerato, PCPI, parte de la búsqueda activa de una idea, comprendiendo cuales son los yacimientos (el entorno) y el motor (la creatividad) que llevan a alguien, habitualmente de forma individual, a esa búsqueda voluntaria y, por lo tanto, motivada. El ciclo emprendedor, según nuestro criterio, debería ser la base de la simulación en estas etapas. En el siguiente diagrama (pulse para ampliar) puede observar el ciclo emprendedor.

El ciclo emprendedor

Esta primera búsqueda es la que denomino fase de alumbramiento, resultando fundamental proponer y argumentar pautas para su desarrollo.

Tras la fase de alumbramiento, concretada la idea de negocio que hemos considerado oportunidad, procedemos a madurar la idea de negocio, momento en el cual es necesario elaborar un documento maestro que denominamos plan de negocio, plan de empresa o, para los amantes del forzado bilingüismo: “bussines plan”. El tratamiento de este plan es interesante como pretexto para madurar, para decidir, para conocer y no únicamente para completar un documento.

La fase de maduración sucede a la fase de alumbramiento.  Esta maduración nos llevará a introducir todos aquellos elementos relacionados con la empresa, evitando hacerlo de forma forzada y atendiendo a la necesidad de comprender una realidad que es objeto de un proceso de maduración y, por lo tanto, de reflexión y toma de decisiones. Se trata de reproducir una toma de decisiones secuencial que permite acercarse a diversas áreas de conocimiento y desarrollar todas y cada una de las competencias. A diferencia de las rutinas que se reproducen en los sistemas de simulación al uso en el sistema educativo, ancladas en el desarrollo de las organizaciones (de un tamaño desmesurado) o en la reproducción del tráfico mercantil, esta propuesta plantea activar como base la iniciativa y autonomía personal, llevando al alumnado y al profesorado a barajar información actual y de calidad, a ligar con el arte, con el conocimiento de la historia, con la filosofía, con la geografía, con las matemáticas, con el uso del lenguaje, con la ingeniería, con elementos actitudinales y también, de una forma no forzada, con el mundo empresarial.

 

El carácter universal y poliédrico del hecho de emprender permite la posibilidad de desarrollar competencias diversas, asociadas a diferentes asignaturas.

Los recursos planteados son versátiles, posibilitando su desarrollo integral o modular, como actividad desarrollada en el aula o como tarea solicitada para su desarrollo fuera del aula. En ocasiones, contemplando la posibilidad de desarrollar actividades en soporte digital.

La amenidad de los recursos se introduce en un doble sentido, el desarrollo de las actividades por parte del docente y el desarrollo de las actividades por parte del alumnado. Entre las valoraciones realizadas por el profesorado que ha participado como alumno de cursos de esta naturaleza destacan aquellas que se refieren a la amenidad de los recursos. Trancribo literalmente dos de ellas:

Me parece muy útil, además me ha abierto muchas vías que desconocía para poder trabajar divirsos temas en clase. Además, me resulta fantástico todo el material y recursos que se ponen a disposición.

– Desde mi punto de vista, coincidiendo con la mayoría de mis compañeros, supone un nuevo enfoque en cuanto a la aplicación de los recursos del mismo a mi aula. Desde mi especialidad de Geografía e Historia se hace enormemente importante relacionar el hecho de emprender (y todo lo que conlleva) con su estudio a lo largo de la Historia y, como el concepto ha ido cambiando y por qué. Yo he aplicado a mi aula algunos recursos y los resultados han sido muy buenos, y eso, es a día de hoy para mi un gran regalo. Gracias

En relación a la permanencia de los recursos en el centro en el que se desarrollen y la posibilidad de poder desarrollarlos en años posteriores, el contar con contenidos suficientemente elaborados y la posibilidad de una asistencia y formación al profesorado de forma continuada no harán depender el éxito del proyecto de la rotación del profesorado, posibilitando que este proyecto sea un proyecto de centro.

Volvamos a La Aventura de FER y a una de sus unidades. En este proyecto intentamos cumplir con el encabezado de este post.

FER recursos permanentes, amenos y versátiles

Sin duda la mayor recompensa: la opinión del alumnado y la de sus maestros y maestras. La probabilidad de éxito se eleva de forma exponencial con un profesorado que crea en el proyecto y se implique en su desarrollo. En la primera página de la web se puede acceder a los distintos blogs.

 

Para el desarrollo de cualquier iniciativa emprendedora son necesarios diferentes elementos: una idea a la que se llegue por iniciativa propia, capacidades para desarrollarla y, principalmente, una motivación para alcanzar estos objetivos.

Los objetivos se recogen en lo que he denominado el concepto de éxito. A la motivación la denominamos pasión, gusto por lo que hacemos, el elemento,… En relación a los anteriores elementos cabe el planteamiento de las siguientes preguntas:

1º. ¿Nos encontramos en las aulas alumnado con una motivación inicial para crear empresas? Probablemente esta motivación sea mayor conforme nos acercamos a la necesidad de su inserción empresarial.

En este sentido, los centros de educación permanente, la formación profesional en cualquiera de sus modalidades, los PCPI, el bachillerato y la universidad  resultan fundamentales.

2º. ¿Es posible qué el alumnado aporte la idea de negocio qué sirva para simular el proceso emprendedor? La respuesta de un porcentaje alto del profesorado es que en muchas ocasiones son ellos quienes han de proponerla.

La vía didáctica de la construcción se basa en la posibilidad de simular el proceso emprendedor, como es práctica habitual en los programas de esta naturaleza, proponiendo el alumnado una idea individualmente o en grupo.

La vía didáctica de la deconstrucción aprovecha el acercamiento al tejido empresarial local o el uso de otros estudios de caso para comprender las pautas del proceso o ciclo emprendedor. Esta vía salva la falta de motivación inicial o/y la inexistencia de una idea.

El simulador CRECE, instrumento fundamental de nuestro proyecto educativo Creando Cantera (dirigido a ciclos de formación profesional, bachillerato, educación permante, PCPI y universidad), trabaja constantemente estas dos estrategias.

Simulador CRECE

La construcción en una categoría de tarea reflexiva estructurada que denominamos «Planifica», mientras que los recursos dispuestos y las tareas propuestas trabajan en la línea de la deconstrucción. Por ejemplo, nos acercamos al caso de «Jesús el chatarrero» y su lectura proactiva del entorno a través del uso del documental y la noticia.

Lógicamente, el uso de estas dos vías es complementario, planteando recursos didácticos en cada una de estas categorías.