El fomento de la cultura emprendedora se impone como necesidad en las últimas décadas, resultando prioritario tras la crisis que asola a la sociedad occidental desde hace algunos años.
En este sentido, desde distintas parcelas se han promovido proyectos o intervenciones de carácter educativo en los que la empresa, en la mayoría de ocasiones de forma forzada y excesiva, ha sido el centro, incidiendo con mayor o menor insistencia en los aspectos que tienen que ver con la motivación del alumnado y con el fomento de la iniciativa personal.
En esta línea, desde la parcela universitaria se incluyen asignaturas de creación de empresas que no sólo se vinculan a las carreras universitarias relacionadas con la administración de empresas, sino que afectan a otras disciplinas: humanidades, ciencias de la salud, ingenierías,…
Es la formación profesional, la vía o itinerario formativo que de una forma más directa ha optado por el planteamiento del autoempleo como fórmula de inserción empresarial, siendo esta búsqueda más evidente en la asignatura “Empresa e iniciativa emprendedora” que en la asignatura “Formación y Orientación Laboral”.
En el bachillerato es menos evidente esta búsqueda de la orientación hacia el autoempleo, encontrando algunas referencias en las asignaturas del itinerario de bachillerato relacionado con las ciencias sociales.
Se ha incidido en exceso en la vinculación de la iniciativa emprendedora a la empresa, porque como ya indicara en el manual “Enseñar a emprender. Salvando estereotipos” es necesario comprender el hecho de emprender de un modo poliédrico. Una revisión de los proyectos institucionales EME y EJE, que serán foco de análisis de otro post , permiten observar ese exceso de focalización empresarial.
Una persona que acompañe a un familiar a la terapia de grupo de un programa de desintoxicación de personas alcohólicas es una persona emprendedora, una persona que participa en su empresa de forma proactiva siendo contratada por cuenta ajena es una persona emprendedora y, cómo no, una persona empresaria que actúa de forma responsable también lo es, sea cualquiera la figura jurídica bajo la que desarrolla su actividad empresarial.
Del mismo modo, cuando en ciclos educativos previos a la inserción laboral se vincula la iniciativa emprendedora al mundo empresarial, se cae de forma reiterada en el error de vincular exclusivamente el hecho de emprender empresarialmente a la simulación del funcionamiento de la empresa. Para ello, invito a la revisión de los materiales, intervenciones y proyectos ya desarrollados en relación al fomento de las vocaciones emprendedoras empresariales en los estudios de formación profesional y bachillerato.
El sistema educativo es por naturaleza emprendedor, lo fue, lo es y lo seguirá siendo.
Desde siempre me ha apasionado el concepto de educación inspirado por la Institución Libre de Enseñanza, promovida por Don Francisco Ginés de los Ríos y, más tarde por Cossío. Su relación con la Residencia de Estudiantes, la labor de las Misiones Pedagógicas nos hablan de un sistema educativo que es, por naturaleza, emprendedor.
Hace unos años, meses antes de morir, mi tío Cristóbal Rodríguez Cirera me hablaba de como acompañaba a mi abuelo Manuel Rodríguez Gil a pueblos cercanos a Alhama de Almería, población de la que eran originarios, para ayudar en el montaje de escenarios y espacios para proyecciones de cine en pueblos cercanos. Investigaciones posteriores me han llevado a comprender que se trataba de las Misiones Pedagógicas desarrolladas en las localidades almerienses de Alhabia, Terque, Alsodux,… Mi abuelo, carpintero y concejal del ayuntamiento alhameño, como tantos hombres y mujeres de su época sin estudios primarios, participaba en la promoción de las Misiones Pedagógicas en cuya fundación participara Nicolás Salmerón y Alonso, presidente de la República Española y alhameño de cuna.
Cuaderno_divulgativo._Giner_de_los_Ríos
Recomendable resulta la película francesa “Ser y tener”, película documental en la que se refleja la creatividad, las habilidades y el “elemento” de un profesor de la Francia más rural.
Experiencias como las anteriores me llevan a afirmar que se plantea como extraordinario lo que es ordinario en el quehacer diario docente y que es necesario su empoderamiento.