Jueves, 6:30 de la mañana, transbordo de bártulos entre maleteros. Material para sesión presencial de curso inicial Creando Cantera, dirigido al profesorado de la Subbética de Córdoba, material de cámara y la maleta de Aurelia.
Gracia, Jota y Pedro me acompañan. Llegamos a Priego a las 9:30 y realizamos toma de contacto con Carmen Calvo, entre probetas, pipetas, vasos de precipitados y reactivos varios nos explica el trabajo desarrollado en Oleosur.
Entre Priego y Zagrillas, Pepi nos muestra las instalaciones de su granja escuela: el lombricario, las vacas, las avestruces,… Mientras, pequeños y pequeñas escalan el rocódromo para alcanzar, sin más pretensión, una cima.
Magdalena, en Luque, nos muestra como aplica las últimas tendencias en su negocio de peluquería y estética. Hijo de una gran comerciante, valoro su referencia a la necesidad de combinar discreción, complicidad y cercanía.
Tras un rápido almuerzo, tres horas de introducción a un programa y a un curso financiado por el GDR de la Subbética. El profesorado, atento y diligente, me hace sentir bien. La colaboración del CEP Priego-Montilla lo hace todo más fácil.
Confío en ser útil, en seguir siendo honesto en los planteamientos, en no entrar como elefante en cacharrería. Volveremos dentro de dos semanas para tomar la información que permitirá ilustrar acerca de Historias de Empresas de Base Rural y Real Andaluzas.
Seguimos innovando, seguimos formando, seguimos fomentando la cultura emprendedora de base endógena andaluza.